martes, 30 de octubre de 2012

{placeres anti-crisis} incluso en lunes

Yo lo tengo claro. A mí los lunes me gustan de por sí. Por aquello de empezar de nuevo y todo eso que cuento mil veces por aquí. Pero si encima no solo empiezas una nueva semana, sino también un nuevo trabajo, la cosa ya es para tirar cohetes.

Así que ayer, además de ser lunes, tuve la suerte de disfrutar de algunos placeres adicionales. A saber:

- Desayunar tempranito viendo por la ventana la luna llena más grande que recuerdo en mucho tiempo.

- Ver amanecer camino al trabajo, en medio de estos extensos campos charros.

- Conocer a nuevos (y encantadores) compañeros en mis dos nuevos coles.

- Conectar a los 5 minutos con la compañera con la que pasaré más tiempo, y echarnos unas risas en el recreo.

- Comer en un mesón una comida casera (pero casera de las de verdad), mientras el solete te calienta la espalda.

- Ver un espectáculo de atardecer a la vuelta, con el sol desapareciendo entre cielos naranjas por un lado, y la luna (enorme!!) apareciendo en un cielo violeta por otro. Difícil mirar a la carretera...

- Mini paseo con Mateo y castañas asadas.

- Una rica cena que te espera al llegar a casa (joya de marido, lo sé).

- Ver las caritas de concentración de los niños mientras intentan hacer "ejercicios de relajación" con papi antes de ir a dormir.


- Leer un poco antes de dormir.


- Besos, achuchones y sonrisotas para despedir bien el día.



Así que podemos resumir este primer día de cole con un "Todo OK".



Por si era poco maravillosa la semana, mañana nos vamos de escapadita gallega, si consigo hacer las maletas mientras preparo clases y demás tareas pendientes. Para no variar.

miércoles, 24 de octubre de 2012

{notengoIPhone} me hago mayor

O eso, o es que me sienta fatal estar en el paro. 

Por una parte, está bien tener tiempo para leer ese libro que dejaste aparcado, planificar ese armario empotrado que lleva en proyecto 2 años, reorganizar habitaciones y todas esas cositas que normalmente no puedes hacer.

Pero de repente te encuentras no sé cómo en una tienda comprando unas agujas de calcetar y unos ovillos... Probablemente tenía 14 o 15 años la última vez que hice algo de calceta. No sé por qué ahora ni por qué calceta, ni por qué ese color de ovillo!! Ha sido automático, impulsivo e irracional. Pero ha sido coger la aguja y empezar a montar puntos como si lo hubiera hecho a diario. Como montar en bici. No se olvida. Bueno, a ver, que solo sé hacer punto del derecho, no esperéis mucho de mí! Pero me ha hecho ilusión. 

Es el complemento perfecto para los capítulos de mis series favoritas online, con las que me estoy poniendo al día también. Antes las veía mientras comía compulsivamente kilos de pipas o palomitas. Sustituir el bol de guarrerías por las agujas de calcetar me va a venir de perlas. Y encima igual consigo hacer una bufanda o algo "ponible"...


Pero no puedo evitar pensar que me ponen un braserito y la telenovela del mediodía y soy la perfecta abuelilla. Al menos es la cara con la que me mira A. cuando me ve coger las agujas. Esa cara de "deja algo para cuando tengas 80!".

En fin. Me relaja un montón hacerlo y me gusta, que piense lo que quiera. Como se dice, "ande yo caliente, ríase la gente".

Y como termine la bufanda verás lo calentita que voy a andar... :-)

domingo, 21 de octubre de 2012

{fotovitaminas para los lunes} mirando hacia arriba

Otro lunes. Y no será como yo esperaba. Ni como muchos esperaban. Por una u otra razón, todos nos llevamos una decepción alguna vez (más de una, seguro!). Las circunstancias no son como esperábamos, todo parece haber salido al revés... Y aquí nos quedan dos opciones: 

-Dedicarnos a lamentarnos por lo que no nos gusta, criticar a unos y otros, y enfurruñarnos por las circunstancias (porque no podemos cambiarlas). ¿Ganamos algo? Sí, algunas arrugas extra en el entrecejo. Y poco más. 

- La opción B me gusta más. Porque yo no puedo cambiar las circunstancias cuando yo quiera, pero si puedo cambiar mi reacción / actitud / forma de llevarlas. Y yo decido llevarlas así.



Vale que con esta opción no te libras de más arrugas y patas de gallo, pero vaya, mucho más llevaderas! :-)

Así que mi lunes va a ser así, mirando hacia delante, y sobre todo hacia arriba. Y sin perder la sonrisa. 



Feliz semana!

viernes, 19 de octubre de 2012

{placeres anti-crisis} cuando más falta hacen

Hace ya más de un mes desde que publiqué los primeros {placeres}, pequeñas cositas del día a día que convendrían no olvidar y aprender a disfrutar otra vez, que pasan desapercibidas y no las valoramos! Y hoy necesito fijarme en esas pequeñas cosas más que nunca.

El objetivo que tenía desde hace un mes (un cole especial, como os comenté el otro día) no pudo ser. A veces pedimos deseos porque pensamos que es lo mejor para nosotros...


... y le damos mil vueltas, nos hacemos ilusiones... y en un momento se las lleva el viento...


Y aunque confío plenamente en que todo pasa por algo, y que El Jefe es el que controla todo esto y sabe lo que hace, hoy no puedo evitar estar un poco de bajón. Por eso me traigo aquí todos los pequeños placeres de los que he disfrutado estos días... para compensar.

- Fin de semana largo de retiro, relax, buenos amigos, buenos ratos, muchísimas fotos y mucho en lo que pensar.

- Una mañana haciendo galletas con amigos.

- Compras exprés en 20 minutos y que todo te siente bien.

- Encontrar por casualidad lo que has estado buscando un mes.

- Comer las primeras castañas asadas del año.

- Descubrir una nueva serie (en internet) de las que enganchan y te dejan todo el día con una sonrisa puesta.

- La casa vacía por las mañanas, ideal para hacer las tareas bailando y cantando a grito pelado la banda sonora de la susodicha serie sin que nadie sufra daños colaterales.

- Ver la lluvia por la ventana mientras te llega el olorcito de la cena que te están preparando.

- Poder acompañar a los peques al cole y sin prisas.

- Quedar con amigos para cenar (eso ya será mañana, pero ya solo el quedar y hacer planes es un placer!).

...

Y tantas pequeñas cosas. Como para quejarse y enfurruñarse porque UNA cosa no sale como esperaba... Nada, a sacar la cabeza del agujero y mirar adelante.




Además es viernes!

:-)

miércoles, 10 de octubre de 2012

En buenas manos

Nada como poner las cosas en manos expertas. 

Hace dos años y medio escribí un triste post tras romper por accidente mi más querido objetivo (en aquel momento). Literalmente roto en dos partes. Por puro valor sentimental, lo guardé en una bolsita en el fondo del armario. Y después de tanto tiempo encuentro un técnico que me lo va a arreglar por unos treinta euros. No me entra la sonrisa en la boca.

Hace dos años y pico me acababa de graduar de mi segunda carrera, y poco imaginaba yo que estaría trabajando tan pronto en un cole. Ahora mismo estoy número uno en la lista de interinos, esperando que me llamen en cualquier momento... Bueno, no en cualquier momento. Tengo un objetivo muy preciso, un cole muy especial al que me gustaría ir, pero no es cosa mía. Estas cosas las suelo dejar como siempre en Manos Expertas, que el Jefe sí que sabe!! :-)

Hace cinco años empecé a interesarme en serio por esto de la fotografía. Y desde que me uní a Flickr empecé a conocer a gente maravillosa, grandes aficionados y verdaderos expertos, que me ayudaron, guiaron y enseñaron. He tenido muy buenos maestros, y aunque he sido una alumna bastante torpe y con no tanta dedicación como me hubiera gustado, he disfrutado mucho el proceso. De los muchos grupos inspiradores que me he encontrado, La Vuelta al Mundo tiene un "no-sé-qué" especial, y por eso siempre estoy esperando que empiece el mes a ver qué nuevo reto nos propone Jackie. Este mes nos toca el tema "En las manos", así que tenía que intentar algo (hace demasiado tiempo que no participo y ya lo echaba de menos!!!). 



Él sí que es un experto... en galletas de mamá. Ya sé por qué no las hago más a menudo: ¡porque no me duran nada!!





Feliz jueves que sabe a viernes!! 

lunes, 8 de octubre de 2012

{fotovitaminas para los lunes} Reseteo

Yo pensaba que a los Mac esto no les pasaba, pero a veces también se bloquean (no son perfectos ellos, por más que Apple nos los quiera vender como tales), y no queda más remedio que reiniciarlos. Te fastidian lo que estás haciendo, se quedan congelados un rato (¿o sólo el mío, que ya está viejito??)... en fin, un fastidio. Pero nada que un "reseteo" no pueda arreglar. Igualito que nos pasa a nosotros. O al menos a mí, mucho más imperfecta que mi MacBook (y mucho más vieja!).

El sábado me "reseteé". La semana pasada fue de esas que bloquean al más pintado, y llevaba demasiadas cosas encima sin resolver. No me quedó más remedio que borrar mi "disco duro", eliminar algunas "aplicaciones" que me estaban quitando tiempo más que ayudándome, borrar mi carpeta de "tareas pendientes" y sustituirla por una mucho más pequeña de "tareas importantes para hacer a lo largo del mes. Sin agobios". El proceso fue corto pero intenso. Y mi nueva actualización, Rebe 3.8, está funcionando a las mil maravillas. Y es que tengo el mejor Técnico del mundo.

El primer síntoma de mejoría han sido las ganas de coger la cámara. Curiosamente le ha pasado lo mismo hoy a Marta (acabo de leer su post y lo podía haber escrito yo!!). Así que os dejo algunas de las sonrisas que me han regalado hoy, para empezar bien la semana.





Mejor así. Muuuucho mejor!



Que tengáis buena (y corta!!) semana.

viernes, 5 de octubre de 2012

{notengoIPhone} cielo abierto

Nunca un viernes noche supo tanto a gloria. Normal después de esta semana, que juraría que ha durado mes y medio...

Madrugones inhumanos, especialmente para niños tan pequeños. 
Programa de madrugadores del cole.
Libros, papeles, tuppers, mochila y bolsas más grandes que la que las lleva.
Carreras al autobús viendo amanecer.
Autobuses atestados de gente.
Clases atestadas de gente.
Pausas para el café que nunca llegas a tener.
Corrección de exámenes interminables (tres de los cinco días)
Novatas que te quieren enseñar a hacer el trabajo que llevas haciendo diez años.
Gente que se escaquea y te quiere cargar a ti su tarea.
Tuppers para comer en el trabajo.
Autobuses atestados de gente que huele peor que por la mañana. Justo después de comer. 
Recoger niños.
Caminata a casa (media hora a paso de niño, con un sol y un calor difíciles de creer en pleno octubre).
Supervisión de lavavajillas, lavadoras y deberes de Mateo al mismo tiempo.
Autobús con menos gente pero aún con el olor del mediodía... y recalentado.
Más clases.
Letrero de "Salamanca" que te recuerda donde estás (en tu estado de catatonismo a veces se te olvida).
Arrastrar cuerpo inerte a la parada del bus viendo atardecer.
Tiempo justo para dar beso de buenas noches a los niños.
Corrección de pila de redacciones que te has traído a casa.
Horas indecentes de acostarse.

Reiniciar. Y en ocasiones, aderezar con reuniones urgentes del padre de las criaturas, y malabarismos para dejar a los peque con los abuelos mientras tanto.



Las palabras "La semana que viene solo tienes cuatro horas por la mañana" fueron música celestial para mis agotados oídos. Ví el cielo abierto otra vez. Los pajaritos han vuelto a cantar, aunque sean las diez de la noche, y aunque hoy mi dedo friki vuelva a hacer de las suyas, mañana al despertarme cambiaré el grito de dolor por un "yupiiiiiiiiiii!!!!!!!!!!". 

Si tengo fuerzas.


lunes, 1 de octubre de 2012

{fotovitaminas para los lunes} mi dedo friki

Estoy a punto de contaros un Expediente X, así que luego no me miréis con cara rara o como si estuviera loca. Es verídico todito.

Desde hace unas semanas, mi dedo gordo de la mano izquierda tiene vida propia. Me levanto por la mañana y está como fuera de su sitio, inmovilizado en una posición extraña y dolorosa. Me despierto con ese dolor, y cuando intento moverlo, algo hace "clack" y vuelve a su lugar (tras un aullido de dolor por mi parte). 

Consultando con entendidos del tema, parece ser que el estrés y la tensión, esa que antes se me acumulaba en las cervicales y me daba dolores de cabeza día sí y día también, ahora se me acumula en algún tendón de la mano y me lo disloca al tensarse más de la cuenta. Algo como el bruxismo, ese rechinar de dientes por tensión acumulada, con el que Mateo deleita nuestras noches... (será cosa de genes??).

Pues comprobado, días relajados dan lugar a noches con el dedo en su sitio... pero ay de los días estresantes, ya sé lo que me espera la mañana siguiente... Y hoy es uno de esos días. Con lo que me gustan a mí los lunes, y que tenga que haber gente empeñada en fastidiártelos... Ya me duele el dedo sólo de pensarlo...

Así que me traigo una ración de mi cura para todos los males: besos, sonrisas y abrazos de oso.



(Y si esto además me cura mi dedo friki, les pongo un monumento a mis chicos!)

Feliz y desestresada semana!